lunes, 17 de diciembre de 2012

Los islamistas egipcios proclaman su ventaja en el referéndum constitucional


El texto logra un 56% de apoyo en la primera fase de la consulta, según datos oficiosos

El Cairo vota en contra del borrador de Carta Magna


Funcionarios electorales cuentan votos en un colegio de El Cairo. / MAHMOUD KHALED (AFP)
El sí se impuso por un margen más ajustado de lo esperado por los analistas en la primera jornada del referéndum constitucional celebrada el sábado en Egipto. Según datos oficiosos proporcionados por el Partido de la Libertad y la Justicia, la marca electoral de los Hermanos Musulmanes, un 56,5% de los ciudadanos votó a favor y un 43,5% en contra del borrador constitucional apadrinado por las fuerzas islamistas. Unos 26 millones de egipcios residentes en 10 provincias estaban convocados a las urnas para la primera ronda. El resto votará el próximo sábado 22 de diciembre.
La victoria islamista se ha visto oscurecida por los informes de las ONG egipcias que monitorearon la consulta, y que señalan la existencia de numerosas infracciones, la gran mayoría cometidas por los partidarios del sí. Entre las más comunes, la propaganda dentro de los colegios y las mezquitas, la compra de votos y la intimidación de los ciudadanos. Además, en varios colegios se ausentaron los jueces encargados de garantizar la neutralidad del proceso.
“A pesar de la revolución, tuvimos un referéndum como los celebrados en la era Mubarak... Las irregularidades invalidan todo el proceso”, declaró en una rueda de prensa Bahi el-Din Hassan, responsable de la organización de derechos humanos CIHRS. Un total de siete ONG han instado a la Comisión Electoral a repetir la jornada de votación, una petición también expresada por los portavoces del Frente de Salvación Nacional, la principal coalición opositora.
Habida cuenta de que ya han votado las dos grandes ciudades, El Cairo y Alejandría, y que la próxima semana lo harán algunos de los feudos islamistas, como las provincias de Al Fayum y Damietta, no existe ninguna duda de que el borrador de la primera Constitución del Egipto posrevolucionario será ratificada en las urnas.
Ahora bien, el ajustado margen de la victoria invita a pensar que el texto deberá enmendarse pronto. Como sucede a menudo en las eliminatorias futbolísticas, al presidente Mohamed Morsi no le servía una simple victoria. Según todos los expertos, para ser legítima y duradera, una Constitución requiere siempre amplios consensos.
La participación superó ligeramente el 30%, por debajo del 50% de las presidenciales
Varios líderes islamistas habían pronosticaban una victoria aplastante, con más del 70% de síes. También los analistas habían fijado un umbral parecido para determinar el éxito o fracaso de la Constitución. “Si la Constitución es aprobada por más de un 70%, será difícil para la oposición sostener las protestas en las calles”, escribió en su cuenta de Twitter Shadi Hamid, investigador del think tank Brookings Institution.
El no se impuso en dos de las 10 provincias, y en la capital lo hizo con claridad, recabando el 57% de las papeletas. En cambio, en algunas provincias rurales del sur, como Asuán o Sohag, arrasó el sí, una prueba más de la polarización de la sociedad egipcia. La participación, también obtenida de forma oficiosa, se habría situado en el 33%, claramente por debajo del 50% de las presidenciales.
En todo caso, el brazo político de los Hermanos Musulmanes dio por bueno el resultado. “El proceso democrático en esta primera fase del referéndum enfatiza el deseo de la gente de conseguir la estabilidad política e institucional, a pesar de las campañas injustas de difamación”, declaró en un comunicado. “El proceso tuvo lugar en una atmósfera de completa integridad y transparencia, bajo completa supervisión judicial, así como con la presencia de medios locales e internacionales”, añade, restando importancia a las denuncias de irregularidades.
La votación se produjo después de dos semanas marcadas por lasmanifestaciones y enfrentamientos entre partidarios y detractores del presidente Morsi. La crisis política que experimenta el país se inició el pasado 22 de noviembre, cuando el presidente islamista aprobó un decreto por el que se arrogaba poderes cuasi absolutos.
La acción desencadenó una fuerte oposición en las calles. Los Hermanos Musulmanes reaccionaron con una huida hacia adelante y aceleraron la redacción del borrador constitucional, rompiendo el frágil consenso con el que progresaba la Asamblea Constituyente. En las últimas sesiones se retiraron los representantes laicos, y el borrador fue aprobado solo con los votos islamistas, lo que inflamó aún más la convulsa escena política del país. Tras la votación del sábado, nada indica que la azarosa transición egipcia se encaminará pronto por la senda de la estabilidad.
en http://internacional.elpais.com/internacional/2012/12/16/actualidad/1355654701_090577.html

domingo, 16 de diciembre de 2012

AGRADECIMIENTOS

AGRADECIMIENTOS
 A Lía Rodriguez de la Vega y Comisión ALADAA, Sección Argentina/Comunicación - Coordinación Nacional: Liliana Palacios de Cosiansi y a Leandro MorgenfelD  Y POR LA SUGERENCIA DEL BLOG EN SUS PÁGINAS RESPECTIVAS http://www.aladaa.com.ar/enlaces.php  //vecinosenconflicto.blogspot.com.ar/ y a todas las visitas por suerte desde variados países, en esta búsqueda de abrir un nuevo espacio de investigación y debate, por una mayor pluralidad de puntos de vista y de conocimiento del Medio Oriente.

Martinelli Martín
UNLu-Cátedra Libre de Estudios Árabes

Intervención humanitaria en Siria, hace 150 años


Por Pascal Herren
 | GINEBRA (SUIZA)  
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¿Intervención humanitaria en Siria? El pretexto humanitario ya fue invocado anteriormente, en 1860… precisamente por Francia, para intervenir militarmente en Siria, que en aquella época era una provincia del Imperio Otomano. Desde Ginebra, el estudioso Pascal Herren pasa en revista, en este artículo, las verdaderas intenciones de la Francia de Napoleón III, tan inconfesables como las de la Francia sarkozista u hollandista. Y recuerda además las consecuencias, nefastas, que sufrieron entonces los pueblos de la región.
Mucho se habla en los últimos tiempos de una intervención humanitaria en Siria como medio de poner fin a los sufrimientos que desde 2011 ha venido soportando la población afectada por los combates entre el régimen y la oposición armada, combates cuya responsabilidad se atribuye principalmente –con razón o sin ella– al bando gubernamental.
Esa acción de socorro implicaría, por lo tanto, el derrocamiento del actual régimen. Incluso parece que ya empezó a implementarse desde hace meses, de forma indirecta, con la entrega de armamento a los rebeldes y con el envío a Siria de agentes y de grupos de combatientes extranjeros. Sin embargo, recurrir al uso de la fuerza en territorio de un país extranjero sin el consentimiento de las autoridades establecidas constituye una violación del principio de soberanía de los Estados reconocido en la Carta de la ONU. El empleo de la fuerza entre los Estados está prohibido, exceptuando únicamente los casos de legítima defensa o de una acción colectiva aprobada por el Consejo de Seguridad de la ONU.
En 1968, la Corte Internacional de Justicia [de La Haya] condenó el apoyo militar de la administración Reagan a los Contras que trataban de derrocar el poder sandinista en Nicaragua. Washington acusaba al régimen nicaragüense de haber cometido atrocidades, pero la Corte [de La Haya] precisó incluso que ese tipo de apoyo [militar] no era el medio apropiado para garantizar el respeto de los derechos humanos.
Esos obstáculos jurídicos no han impedido la realización de operaciones unilaterales, oficialmente motivadas por razones altruistas, una práctica que se ha desarrollado, por ejemplo, con el bombardeo contra la antigua Yugoslavia durante la crisis de Kosovo –en 1999– y la invasión de Irak –en 2003. El más reciente ejemplo de esa práctica fue la acción emprendida contra Libia en 2011, acción sobre la cual varios Estados señalaron que fue más allá de lo que permitía la resolución 1973 del Consejo de Seguridad de la ONU.
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El 16 de agosto de 1860 un cuerpo expedicionario francés desembarca en Beirut. Según Napoleón III, los militares franceses van «restablecer el orden» en Siria, que por aquel entonces es una provincia otomana. Mencionada hoy como «primera manifestación del derecho de injerencia humanitaria», aquella intervención militar sirvió en realidad para acentuar el dominio económico de Francia sobre la región.

La fundamentación de esas intervenciones unilaterales se basa en una norma de tipo superior, universal: el deber de proteger la vida de cualquier población contra toda amenaza de carácter masivo que pese sobre ella. Pero ese principio, perfectamente legítimo, depende enteramente de la buena voluntad de quien realiza la intervención. ¿Cómo garantizar que el que interviene no utilice el inmenso poder que se arroga al recurrir a la violencia hacia otro Estado para perseguir objetivos que serían censurables? La historia está llena de guerras «justas» que terminaron muy mal para los pueblos implicados. Ya en 1758, el gran jurista Emer de Vattel denunciaba el yugo que los conquistadores imponían a los indios de las Américas con el pretexto de liberarlos.
Los especialistas en el tema han buscado por mucho tiempo un ejemplo de acción de ese tipo realizada por una potencia interventora irreprochable. Y por mucho tiempo creyeron haberlo encontrado en la expedición realizada en 1860 en la provincia otomana de Siria, que entonces incluía el actual Líbano [1]. Durante los meses que van de mayo a agosto de aquel año, entre 17 000 y 23 000 personas, mayoritariamente cristianos, fueron masacradas en el llamado Monte Líbano y en Damasco en medio de enfrentamientos intercomunitarios. En Europa, la noticia causó conmoción en la opinión pública. Las autoridades otomanas fueron acusadas de haber estimulado, e incluso de haber participado, en los excesos cometidos por las milicias drusas en la región de Monte Líbano y por los amotinados en Damasco. Napoleón III decide entonces el envío de un cuerpo expedicionario de 6 000 hombres para poner fin al «baño de sangre», con la aprobación de las demás potencias europeas. Las tropas francesas se mantienen menos de un año en la región y se retiran después del restablecimiento de la calma y luego de implantar una reorganización administrativa a la que se atribuye haber mantuvo la concordia civil hasta el estallido de la Primera Guerra Mundial. Aún hoy, algunos de los juristas que más se oponen al reconocimiento de un derecho de intervención humanitaria aceptan, sin embargo, que la acción de 1860 pudiera ser la única «verdadera» intervención humanitaria del siglo XIX.
Pero un análisis más profundo nos muestra que los problemas intercomunitarios que estallan en 1860 eran también exacerbados por el sistema de clientelas practicado en aquella época por las potencias europeas hacia las minorías locales. Hay que señalar además que los intereses en juego son enormes en ese momento, con el reparto de las provincias de un Imperio Otomano en plena desintegración, [provincias] que los amos de Europa se disputan entre sí. Y Siria se halla precisamente en medio de la estratégica ruta que conduce a la India, la joya del Imperio británico. Francia no esconde por entonces su interés por esa región, rica en posibilidades comerciales, mientras que Rusia trata desde hace tiempo de extender su territorio hacia el sur. Y para lograr sus propios objetivos cada una de esas potencias apoya a alguna comunidad local, para utilizarla a su favor: los franceses se convierten en protectores de los católicos católicos, los rusos defienden a los ortodoxos y los británicos apadrinan a los drusos.
Durante el periodo posterior a la intervención de 1860, Francia acentúa su control económico sobre el Líbano, a tal punto que en 1914 el trabajo del 50% de la población activa libanesa depende de la industria francesa de producción de seda. Un sector [ocupacional] que se derrumba como resultado de la decisión de la industria francesa de independizarse de sus proveedores libaneses, que pierden así sus medios de subsistencia.
Un año más tarde, en 1915, los aliados británicos y franceses organizan el bloqueo de las costas sirias, impidiendo así la llegada de alimentos a esa región altamente dependiente de las importaciones de cereales. El objetivo es lograr que las provincias árabes se subleven en contra del poder central de Estambul, que ya participa en la Primera Guerra Mundial al lado de la Alemania de Guillermo II. El resultado es una hambruna sin precedentes que cuesta 200 000 vidas en el centro y el norte de la región del Monte Líbano y 300 000 vidas más en Siria.
En 1840, Francois Guizot, en aquel entonces embajador de Francia en Londres, resumía de la siguiente manera los cálculos geopolíticos que predominaban entonces en las cortes europeas y que, en su opinión, motivaban la política del ministro británico de Relaciones Exteriores Lord Palmerston: «Allá, en el fondo de algún valle, en la cúspide de alguna montaña del Líbano, hay maridos, mujeres, niños, que se quieren y que ríen, pero que serán masacrados mañana porque Lord Palmerston, a bordo del Railway de Londres, se dice a sí mismo: “Siria tiene que sublevarse. Yo necesito que Siria se subleve. Si Siria no se subleva, I am a fool.”»

sábado, 15 de diciembre de 2012

Referéndum


 Por Hamid Bellahcene el 15/12/12 

Hoy  puede ser un gran día para Egipto en particular y para el resto de la zona en general, el país  celebra su  referéndum constitucional en medio de una gran división en el seno de la clase política, el país además,  ha atravesado momentos de alta tensión en las últimas  semanas, la crisis se produjo con la llamada  declaración constitucional que llevó a cabo  Morsi el 21  del mes pasado.

La mayoría de los medios de comunicación que he consultado  durante esta última  crisis egipcia “informaban” sobre la situación de manera muy sesgada y con poca profundidad, estaba perplejo ante la falta de neutralidad y criterio, en muchos de los casos, ante la crisis política más seria del país desde la caída de la dictadura,  algunos escribieron cosas como: Morsi, aprendiz de autócrata, condenando de esta manera  al hombre en un tiempo record (el presidente egipcio apenas lleva unos pocos meses en el poder) otros  no dudaron en comparar al primer presidente elegido democráticamente en la historia (milenaria) del país con Hosni Mubarak, O todavía más lejos con los mismos faraones. Muchos han llegado a pensar que estábamos ante un nuevo 25 de Enero y no faltaron fotografías de un Tahrir repleto de manifestantes. Aunque prácticamente viéramos Uno en los medios de comunicación,  Egipto se había dividido en dos.
No obstante, en la última semana hubo cambios significativos en el panorama político egipcio, el sábado pasado el pueblo egipcio esperaba con gran expectación el discurso del presidente para salir de la incertidumbre en la que se había instalado pocos días antes, contrariamente a lo que se esperaba, las dudas no se despejaron, cosa que puso nerviosos a todos, incluido a Morsi y su gabinete  que han ido improvisando su actuación con el desarrollo de los acontecimientos, (aprendices). Gracias a las presiones de amplios sectores de la sociedad, desde el partido del gobierno incluido, fue posible  convencer a Morsi de dar marcha atrás, de esta manera  sus decisiones más polémicas quedaron sin efecto.
Entre los efectos de la derogación de la declaración constitucional hay  dos consecuencias importantes:
Por  un lado consiguió bajar el nivel de la tensión que estaba llevando el país al borde de un enfrentamiento sin precedentes entre dos sectores antagónicos de la sociedad.
Por otro, consiguió, aunque en menor medida, dividir a la oposición, fragmentada de por sí, en cuanto a la posición que oficialmente debería tomar ante los hechos el frente de salvación nacional (FSN)  que reúne a los sectores opositores más importantes. Las declaraciones de  Mohamed el Baradei, su coordinador general,  el sábado pasado  daban cuenta de este hecho, después de  expresar días antes en el Financial Times su disponibilidad de aliarse con el antiguo régimen para enfrentarse a los hermanos musulmanes, HH.MM y al islam político, además de afirmar en otro momento que no se sentaría a hablar con Morsi si no deroga la declaración constitucional  y no cambia la fecha del referéndum previsto. Marcando  un giro en su discurso  el hombre hablaba del dialogo para salir de la crisis. Una victoria para Egipto.
Amr Musa por su parte fue más lejos hoy al decir  que en ningún caso llamaron a derrocar al presidente expresando su respeto a la legitimidad y añadió que una vez celebradas las elecciones el presidente cumplirá con su mandato establecido por la ley, además “Egipto no soportará el coste político de unas nuevas elecciones presidenciales” un cambio sustancial sin duda en las posiciones de los dos hombres más importantes del escenario político.
En cambio Hamdeen Sabbahi,  el tercer líder visible del FSN, pertenece a la llamada tendencia popular y más cercano a “los jóvenes de Tahrir”  sigue manteniendo  una posición intransigente y no  duda en repetir que los hermanos musulmanes les han defraudado. Una evolución muy notable desde luego teniendo en cuenta que al principio estaba más cerca de losHH.MM.
Para rematar, entraron en escena los llamados fulul bajo pretensiones como proteger la democracia y salvar la revolución y se trata de personalidades de la era Mubarak  que  ven peligrar sus logros y privilegios en todo momento, éstos no dudarían  en llevar Egipto al desastre. 
La cita de hoy además de ser un termómetro de la popularidad del presidente y en consecuencia del principal  partido que le apoya, servirá para el ajuste de cuentas entre dos grandes bloques ideológicos que actualmente están enfrentados, el islam político y sus adversarios, probablemente sea un test para el primer
La realidad política egipcia de hoy, día quince de diciembre del año dos mil doce, fecha  del referéndum,  no es más compleja que antes pero si más crítica y el  gran peligro  es la polarización a la cual  ha llegado la sociedad en todos sus niveles.  Hoy es un gran día para Egipto si la clase política logra pasar la prueba, independientemente de los resultados. Hoy todos los escenarios son  posibles en el país, en el futuro podemos recordar este día como el día del Referéndum que  acabó con el peligro del caos que se cierne sobre  Egipto, podemos recordarlo, Dios no lo  quiera, como fecha del inicio del caos y el desorden o lo peor  de todo el día en el que empezó una guerra más en oriente medio, una guerra civil…
Egipto ocupa una situación geoestratégica de una importancia enorme, no solo es la reserva cultural de los árabes sino que es, además un actor imprescindible a nivel regional, oriente medio es y por desgracia seguirá siendo una de las  zonas  con  mayor  número  de  conflictos en el mundo, y con un  Egipto inestable perderá toda la zona.   Por último cabe señalar, que los resultados del referéndum de hoy pueden  inclinar el transcurso de los hechos hacia un escenario u otro aunque, por muchos motivos, sea imposible el fin de la crisis  política a corto y medio plazo.

publicado en su blog http://ecohamid.blogspot.com.es/2012/12/referendum_15.html

blog Descubrir el mediterraneo

viernes, 14 de diciembre de 2012

Turquía ante el conflicto sirio


Carmen Rodríguez | 15 Oct 2012
La Guerra Civil siria ha implicado inevitablemente a su vecino turco. Una primera y dramática consecuencia fueron las oleadas de refugiados que comenzaron a abandonar Siria en el año 2011. En la actualidad, se estima que alrededor de 94.000 personas han cruzado la frontera y las Naciones Unidas han pronosticado que, para finales de año, es probable que Turquía deba hacerse cargo de cerca de 280.000 refugiados.
Si bien las relaciones entre Ankara y Damasco habían sido excepcionalmente positivas en los últimos años, a raíz de los acontecimientos que se sucedían en el país vecino, el gobierno turco decidió tomar una clara posición a favor de un cambio de régimen. Esta apuesta ha llevado a confrontar al ejecutivo de Tayyip Erdoğan con el gobierno de Bashar Al-Assad. Turquía ha apoyado al Consejo Nacional Sirio y a la oposición armada del Ejército Sirio de Liberación. Entre esa oposición armada se encuentran combatientes salafistas provenientes de otros países, cuya presencia ha contribuido a radicalizar las consecuencias del conflicto sirio.
La tensión entre los gobiernos turco y sirio se ha incrementado notablemente en los últimos meses. En junio, un avión militar turco fue derribado por fuerzas sirias, por lo que Turquía convocó una reunión de consulta con los otros miembros de la OTAN amparado en el artículo 4 de su carta. En octubre, cinco civiles turcos perecían en Akçakale bajo fuego sirio. Tras este ataque, el Parlamento turco concedió permiso al gobierno (sin unanimidad) para llevar acciones militares al otro lado de la frontera. El gobierno turco se ha empeñado en matizar que no se trata de una declaración de guerra contra Siria, sino de ejercer el derecho de respuesta ante las agresiones sirias. En el interior, la población turca se ha mostrado mayoritariamente en contra de que Turquía declare la guerra a Siria.
El régimen de Al-Assad es apoyado por Rusia e Irán, dos países clave por razones comerciales y diplomáticas para Turquía. Por otro lado, Estados Unidos y la Unión Europea rehúyen implicarse directamente en el conflicto sirio. Para Turquía no es deseable, por lo tanto, una intervención unilateral que la enfrente a Rusia e Irán. El gobierno turco desearía una rápida transición que acabe con la inestabilidad siria. En un primer momento su no rotundo al régimen de Al Assad está siendo más matizado, y el ministro de Asuntos Exteriores turco, Ahmet Davutoğlu ha propuesto que el cambio político sea dirigido por el vice-ministro Faruk-Al Shara, una posición que acerca Turquía a Rusia, cuyo gobierno aspira a que la transición siria cuente entre sus dirigentes con parte del régimen anterior.
En la prensa nacional turca, las críticas de los columnistas apuntan que el ejecutivo turco se implicó en el conflicto sirio sin tener el peso diplomático y militar necesario para ello, haciendo de él un asunto de política interior o incluso de “honor”, lo que le ha dejado un margen de maniobra muy estrecho. Aunque el Gobierno turco no pretenda, en estos momentos, llevar la confrontación con Al-Assad hasta sus últimas consecuencias, la inestabilidad en la zona hace que sea impredecible saber lo que ocurrirá en el futuro.
Inicio en http://www.opemam.org/node/183

El dilema de la seguridad en el Medio Oriente


Por:  Versión para imprimir

El actual conflicto en el Medio Oriente es un caso de dilema de seguridad en el cual las partes del conflicto perciben erróneamente las posiciones entre si y desarrollan políticas que contribuyen aun más a la tensión en la región. El día 29 de noviembre pasado, la Autoridad Palestina recibió un abrumador apoyo en la Organización de Naciones Unidas en términos de su ascenso a la condición de estado no miembro. Aunque el valor simbólico del éxito palestino es sin duda significativo desde la perspectiva palestina, este en el futuro cercano posiblemente no contribuya mucho a la solución del conflicto. Los grandes factores en el conflicto, Estados Unidos apoyando a Israel y Rusia, China y la India apoyando la posición palestina reflejan la complejidad de la situación.

Palestina tiene todo el derecho a la condición de estado. La cuestión no es si Palestina debe ser estado o no, sino cuando. El presidente Mahmoud Abbas se veía jubiloso en la ONU cuando declaró que esa era “la última oportunidad para salvar la solución de dos estados” con Israel. La posición palestina obtuvo el apoyo de 138 miembros de la ONU, 41 abstenciones y nueve en contra. La simbólica victoria de Palestina fue celebrada por miles de personas marchando en la ciudad de Ramallah con retratos de Abbas y Yaser Arafat. Abbas declaró en la ONU “no aceptaremos nada menos que la independencia del estado de Palestina con Jerusalém Oriental como su ciudad capital en todo el territorio palestino ocupado desde 1967.” No obstante, la situación en el terreno continuó siendo la misma. Por otra parte, Israel declaró que la votación en la ONU fue “una pieza teatral de política negativa que perjudicará la paz”. La idea del presidente Obama durante su primera presidencia sobre la calidad de estado de Palestina en el plazo de un año sigue estando paralizada y recibió ataques desde Israel y sus aliados en Estados Unidos. El Primer Ministro israelí, Benjamín Netanyahu expresó abiertamente su apoyo al candidato republicano, Mitt Romney, durante las elecciones recientemente efectuadas.

La simbólica victoria de Palestina en la ONU fue replicada por Israel el día siguiente 30 de noviembre, anunciando la construcción de otro asentamiento compuesto por tres mil viviendas en Cisjordania.

A pesar de las protestas de los palestinos, el gobierno de Israel está decidido a continuar con el proyecto. Es muy posible que este proyecto cree obstáculos a la comunicación entre la parte norte y la parte sur de Cisjordania. La cuestión es cómo esta simbólica victoria ayudará a Palestina considerando su aparente debilidad ante las poderosas fuerzas armadas de Israel. Mientras Mahmoud Abbas aboga por una solución pacífica del conflicto, no podrá conseguir gran cosa debido a la falta de apoyo de parte de Hamas y también debido a la intransigencia del gobierno israelí. Israel teme que la Autoridad Palestina pudiera utilizar su recién obtenido status para llevar a Israel a la Corte Internacional de Justicia, lo cual encendería aun más el conflicto y lo llevaría a la arena internacional. La falta de apoyo internacional a Palestina en términos de compromisos diplomáticos para una solución de dos estados ha complicado aun más la situación.

El conflicto del Medio Oriente tiene aspectos más amplios, no solo limitados a Israel y Palestina. Desde la creación del estado de Israel en 1948 este sufre el dilema de la seguridad e interpreta al mundo árabe como su enemigo. La guerra de 1967 polarizó aun más las relaciones. Algunos países en la región no reconocen al estado de Israel. Pero esto de ningún modo justifica la violencia en la región ni la ampliación de los asentamientos en Cisjordania. La construcción de asentamientos por parte de Israel no está dentro del ámbito del derecho internacional. Debido a lo anterior, el escenario ideal de la solución de dos estados se aleja cada vez más de la realidad, Mahmoud Abbas, considerado como moderado ha sido marginado por el extremista Hamas. Esta falta de unidad entre los líderes palestinos debilita su posición negociadora frente a Israel. La violencia del mes anterior que mató a más de cien personas en la Franja de Gaza no agregó nada al discurso del conflicto en la región, excepto la muerte y la destrucción. Diplomáticamente hablando, Egipto podría reafirmar su papel equilibrador en la región junto a Estados Unidos declarando un alto al fuego, pero en el terreno el conflicto siguió siendo el mismo y quizás hasta lo prolonga.

El cuarteto del Medio Oriente compuesto por la ONU, la Unión Europea, Rusia y Estados Unidos hasta ahora no ha podido desarrollar una agenda común para la región. Dos de los factores, Rusia y Estados Unidos, asumieron posiciones diferentes durante el planteamiento palestino en la ONU. Mientras Rusia y Francia apoyaban el planteamiento, Estados Unidos se oponía a este al tanto que el Reino Unido se abstenía en la votación. La falta de cooperación entre los actores internacionales ha hecho del Medio Oriente un crisol de la política de poder.

La rigidez de las posiciones, la violencia que persiste, el territorio bajo el control palestino particularmente en Cisjordania, reduciéndose cada vez más con el paso de los años. Aunque la simbólica victoria palestina en la ONU podría darle un respiro a Abbas y ayudarlo a reafirmar su autoridad, él es visto con mayor frecuencia como opuesto a la guerra y sus diferencias con Hamas es agitada por Israel como incompetencia de su parte para representar a todos los palestinos.

A menos que aliados cruciales de Israel ejerzan como requisito presión y conjuguen recursos diplomáticos con vistas a una solución a largo plazo del conflicto, es posible que la carnicería continúe en el Medio Oriente. Las potencias emergentes como Rusia y China pueden también desempeñar un rol positivo para conseguir la paz en la región. Es posible que con el advenimiento de los BRICS el conflicto consiga la participación de más factores internacionales en la región. Sin la intervención sistemática y permanente de factores internacionales, posiblemente la solución de dos estados no se concrete en el futuro cercano. La victoria de Palestina podría restaurar en cierta medida la legitimidad de Abbas frente al pueblo palestino en Cisjordania. Pero a menos que Palestina e Israel se reúnan y con la colaboración de los grandes factores incluyendo al cuarteto y a los BRICS más factores regionales como Egipto, la solución del conflicto en el Medio Oriente no aparecerá en el horizonte en el futuro cercano.

Strategic Culture Foundation 
http://www.strategic-culture.org
Traducción desde el inglés por Sergio R. , en línea en http://www.aporrea.org/internacionales/a155904.html

jueves, 13 de diciembre de 2012

The UN vote to recognise Palestine legitimises a racist status quo


There's bitter irony in the UN's recognition of a much-diminished Palestinian state on the anniversary of its 1947 partition plan
MIDEAST-RAMALLAH-PRESIDENT-ABBAS-SPEECH

Palestinian Authority president Mahmoud Abbas in Ramallah. 'This recognition has diminished the Palestinian state geographically from 43% of historic Palestine granted by the partition plan to less than 18% of it.' Photograph: Ayman Nobani/Xinhua Press/Corbis
On 29 November 1947, the UN general assembly voted to partition Palestine between native Palestinians and overwhelmingly European Jewish colonists. The partition plan granted the colonists (one-third of the population) 57% of the land, and granted the native inhabitants (two-thirds of the population) 43%. On 30 November, the colonists embarked on the military conquest of Palestine, expelling hundreds of thousands of Palestinians. They declared their state on 14 May 1948. Of the 37 Jewish signatories to the "Declaration of the Establishment of the State of Israel," only one was born in Palestine, the Moroccan Behor Chetrit. Palestinians rejected the plan as it dispossessed them of their lands. Arab armies intervened to stop the expulsion but failed and hundreds of thousands more Palestinians were expelled. The colonists conquered the territory assigned to them by the partition plan plus half the territory assigned to the Palestinians.
The partition plan stipulated that upwards of 47% of the Jewish state's population would be Arab while the Arab state would have less than 1% Jewish population. The Plan insisted that the two states could not expel or discriminate against their minorities. For the UN, the "Jewish state" meant a state that champions Jewish nationalism without discriminating against non-Jews, and that its definition of Jewish and Arab states did not allow ethnic cleansing, which is what the Jewish colonists embarked upon immediately. Since then, the colonists and their descendants insist that for them the "Jewish state" is able to discriminate by law and policy against non-Jews for example, through ethnic cleansing.
The UN has affirmed the right of the refugees to return to their homes and be compensated for their losses, which Israel refuses. After Israel's conquest of the remaining 22% of Palestine in 1967 and its establishment of more colonies in the conquered territories, more resolutions were passed condemning Israeli violations of international law.
In 1974, the UN recognised the Palestine Liberation Organisation as the sole legitimate representative of the Palestinians and has since continued to reiterate its commitment to resolutions passed since 1948 calling on Israel to reverse its illegal measures.
After the 1993 Oslo Accords, the PLO was marginalised, and the Palestinian Authority (PA) was recognised as representing West Bank and Gaza Palestinians (but not East-Jerusalemites although they voted in PA elections). Since 2007, the PA ceased to represent Gaza Palestinians, now represented by Hamas. The new PA project became establishing a mini-state on truncated territory in the West Bank without sovereignty. This project ran into trouble because of Israel's ongoing colonisation of the West Bank (and East Jerusalem). Negotiations ceased, leaving the PA without legitimacy or an end goal to its existence.
Yesterday, the general assembly voted to admit Palestine as a state with observer status. Despite assurances to the contrary, the new state is likely to undermine the status of the PLO at the UN. Whereas the PLO represented all Palestinians, the PA only represents West Bankers. This recognition has diminished the Palestinian state geographically from 43% of historic Palestine granted by the partition plan to less than 18% of it (possibly 10%, if we factor annexations, settlements, military areas, etc), and has reduced Palestinians from 12 million people to 2.4 million West Bankers, 40% of whom are refugees.
The vote is essentially an update of the partition plan of 1947, whereby the UN now grants Jewish colonists and their descendants 80-90% of Palestine, leaving the rest to the native inhabitants, and it risks abrogating the refugees' right of return.
A small minority native to the West Bank (about 1.3 million people), for whom the PA claims to speak, will gain UN status as a state under occupation, while the Palestinian refugees in the West Bank (1 million people), along with six million other refugees, risk losing their right of return.
By recognising a diminished Palestinian state, the vote effectively abandons the UN understanding of the "Jewish state" as one that has no right to discriminate against or ethnically cleanse non-Jews. The new arrangement confers the blessing of this international forum on the Israeli understanding of what a "Jewish state" entails– namely, the actually existing legal discrimination and ethnic cleansing practised by Israel –as acceptable. That this occurred on 29 November, the date of the partition plan, reiterates this date as one of continuing defeats for the Palestinians who continue to suffer from Israel's colonial laws, and repeats UN guilt in denying Palestinians their rights not to suffer dispossession and racism. The Palestinians, however, whose majority is not represented by the PA, will no more heed this new partition plan than they did the last one and will continue to resist Israeli colonialism until it comes to an end and until Israel becomes a state for all its citizens with equal rights to all regardless of national, religious, or ethnic background.
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Joseph Massad 30/11/12 guardian UK en http://www.guardian.co.uk/commentisfree/2012/nov/30/un-vote-palestine-legitimises-racist-status-quo

Medio Oriente Actual y Medio Oriente en 1914

The Middle East today: how does its political map differ from 1914? 



The Middle East in 1914



Para ver más click aquí

miércoles, 12 de diciembre de 2012

Los Amigos de Siria negocian reconocer a la oposición como único representante


GUERRA CIVIL EN SIRIA

Representantes de unos 130 países reunidos en Marruecos estudian cómo respaldar a la coalición opositora

Francia descarta de momento abastecer de armas a los rebeldes


Las potencias mundiales que conforman el grupo de los 'Amigos de Siria' han decidido reconocer a la Coalición Nacional de las Fuerzas de Oposición y de la Revolución Siria (CNFORS) como "representante legítimo del pueblo sirio", según consta en la declaración final de la reunión que mantienen este miércoles en Marraquech.
El texto de los 130 representantes internacionales que conforman el grupo, al que ha tenido acceso Reuters, insta al presidente sirio, Bachar al Asad, a "echarse a un lado" y advierte al régimen sirio de que el uso de armas químicas o biológicas recibiría una "seria respuesta".
"Los participantes reconocen a la Coalición Nacional como representante legítimo del pueblo sirio y como la organización que aglutina a toda la oposición siria", se lee en el borrador de la declaración que se negocia en la reunión, a la que no asisten Rusia ni China.
"Bachar al Asad ha perdido su legitimidad y debe echarse a un lado a fin de permitir un proceso de transición política sostenible", continúa la declaración. Asimismo, el borrador anuncia la creación de un fondo "para ayudar al pueblo sirio" y pide a los Estados y organizaciones que hagan sus contribuciones a este fondo.
En referencia a los recientes informes de las Inteligencias occidentales sobre la posible utilización de armas químicas o biológicas por parte del Gobierno de Damasco, el texto advierte de que "cualquier uso de armas químicas en Siria sería repugnante y debería recibir una respuesta seria de la comunidad internacional".

Abastecimiento de armas

Casi 21 meses después de que estallase la rebelión en Siria contra el régimen de El Asad, que se ha cobrado unos 42.000 muertos, la oposición ha arrebatado tanto terreno al Ejército regular que ya no solicita una intervención militar extranjera, ni siquiera que se declare una zona de exclusión aérea para que no pueda ser bombardeada desde el aire.
Pide armas, sobre todo misiles anticarro y antiaéreos. Si se les proporcionan en gran número y se le enseña a manejarlas será capaz de imponer por sí sola una zona de exclusión aérea en los cielos de Siria vaticinaba, a principios de semana, Yasser Tabbara, portavoz de la Coalición Nacional Siria (CNS).
La CNS, que nació hace un mes en Doha (Catar), reagrupa a casi toda la oposición política al régimen de El Asad. Su gran estreno político tiene lugar en la conferencia de Marraquech, pero antes ya ha cosechado varios éxitos. La Unión Europea (UE) la consideró, el lunes, como “representante legítimo” del pueblo sirio. Dos de sus miembros, Francia y Reino Unido, fueron más allá al aceptarlo como “único representante legítimo”, al igual que hará Estados Unidos, según anunció anoche el presidente Barack Obama.
Un mes después de la unificación política se produjo la militar. Un Consejo Militar Supremo (CSM) fue creado, el viernes pasado, en Antalya (Turquía). Se compone de 30 miembros presididos por el general Selim Idriss, originario de Homs, y que desertó hace cinco meses. Se le considera cercano a Catar. “Es un ingeniero respetado y escuchado por los combatientes”, asegura Ignace Leverrier, un exdiplomático francés que anima un blog sobre Siria.
En el Consejo no figuran muchos de los militares que desertaron en un primer momento, como Riad el Asad, que anunció desde Turquía la creación del Ejército Libre de Siria (ELS) en el exterior, pero que carecen de implantación dentro del país. Su presencia no aportaría nada. Tampoco están las milicias yihadistas como el Frente Al Nusra.
En la reunieron de Antalya sí estuvieron presentes espías y consejeros militares de un puñado de países occidentales, empezando por EE UU, y saudíes y cataríes. Estos últimos prometieron armas a la rebelión militar si cerraba filas y este anuncio fue un potente acicate para que se creara el Consejo. “Con esta estructura se pone en pie un órgano legítimo susceptible de recibir ayuda armamentística”, explica por teléfono, desde París, Fahad al Masri, portavoz de la rama interior del (ELS).
La rebelión armada ha recibido ya de Europa y EE UU armas no letales como, por ejemplo, equipos de visión nocturna. Pero su falta de unidad y el temor a repetir la experiencia de Libia, donde los occidentales, con Francia a la cabeza, repartieron artefactos ofensivos a grupos recién creados y, a veces, radicales, les ha impedido ir más lejos.
El presidente francés, François Hollande, ya declaró el mes pasado que había que examinar la entrega de armas a la rebelión. La UE solo prorrogó, el lunes, tres meses más el embargo de armas a Siria, una decisión que revisará, como tarde, en marzo. Sin embargo, esta mañana, el ministro de exteriores francés, Laurent Fabius, ha declarado que París ha decidido "no actuar, de momento" en ese sentido. "Veremos qué ocurre en los próximos meses", dijo el ministro.
En cualquier caso, al margen del reagrupamiento de la oposición, hay otra poderosa razón para que los occidentales sean ahora más proclives a armar a la insurrección. Aunque siguen siendo minoritarios, los grupos yihadistas como Frente al Nusra, afín a Al Qaeda, han ganado peso en el seno de la rebelión. Prueba de ello es que el lunes esta milicia radical se apoderó de la base militar de Darret Ezza, en el norte de Siria.
Equipar y entrenar a los militares rebeldes no radicales, aunque entre ellos abunden los elementos cercanos a los Hermanos Musulmanes, es hacer contrapeso al Frente al Nusra. Para intentar cercenar su actividad, el Departamento de Estado ha incluido a este grupo en la lista de organizaciones terroristas.
Los embates que le propinan rebeldes moderados y radicales hacen que el régimen de Damasco esté noqueado. El último en vaticinar su caída fue, el domingo, en jefe del servicio secreto alemán, Gerhard Schindler. “El régimen de Asad no sobrevivirá”, declaró al diario Frankfurter Allegemeine Zeitung. “Hay crecientes indicios de que (…) está en su etapa final”.

Mil y un libros para asomarse al mundo árabe 2010


En agosto de 2010 se ha publicado la cuarta edición de esta guía de lectura, que reseña en esta ocasión 561 títulos relacionados con el mundo árabe e islámico, agrupados por temas —áreas regionales, pensamiento,  narrativa, poesía, didáctica de la lengua árabe, viajes,   cocina, arte, cómic...—, y que incluye, por vez primera, libros electrónicos. La guía se cierra con un índice de autores.


          El INDICE          
Estudios históricos, sociales y políticos 5                                  
Historia 15
Al-Ándalus y moriscos 17
Migraciones 23
Mujeres 26
Magreb en general 28
136x9999_1001_libros_2010-1Marruecos 29
Argelia 38
Sáhara Occidental 40
Oriente Medio en general 43
Egipto y Sudán 46
Palestina 48
Iraq 55
Líbano y Siria 58
Literatura 59
Crítica literaria, historia 
de la literatura 59
Narrativa y teatro 60
Poesía 79
Biografías y memorias 88
Viajes, literatura de viajes 90
Lengua árabe 98
Manuales y estudios 98
Diccionarios 102
Islam 105
Islam en general 105
Sufismo 116
Cocina 118
Imagen 120
Miscelánea 122
Música 122
Cómic 123
Varios 124