martes, 31 de marzo de 2020

Revolución armada y guerra de liberación popular palestina en la década de los sesenta

Autor: Martinelli, Martín Alejandro
Editor: Medina Gutiérrez, Felipe Cure Hazzi, Diana García, Pío
Materias:
Palestina - Historia - Revolución, 1960-1969
Nacionalismo - Historia - Palestina
Palestina - Historia
Conflicto armado - Palestina
Palabras Clave: Revolución Nacionalismo Resistencia Autodeterminación Lucha armada

Bogotá : Universidad Externado de Colombia, 2019.
Resumen
Este capítulo analiza rasgos propios de Palestina, pero que también pueden verse reflejados en otros Estados y pueblos de la región del Medio Oriente y Norte de África, con los que se retroalimentan, e incluso con influencias estratégicas e ideológicas de algunos casos de nuestra América. La intención es analizar el proceso histórico al interior del movimiento de liberación nacional palestino en la década de los sesenta. Se trató de un momento crucial para comprender el devenir palestino, ya que, frente a los avatares enfrentados, la creación de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) encauzó sus fuerzas políticas y las orientó. Para ello, analizaremos la Carta Nacional Palestina de 1964, con sus modificaciones de 1968 (además de otros documentos de la época), así como la incidencia de la OLP en el desarrollo de ese nacionalismo. Además, sirve para examinar cómo esto impactó en una resignificación identitaria, lo cual refuta el argumento de que dicha identidad habría surgido recién en esta etapa y como una respuesta a la creación del Estado de Israel. Asimismo, todo esto sucedió en el contexto de la Guerra de 1967, que fue una bisagra, dadas sus consecuencias, tanto para la historia del territorio como de la región y el resto del mundo. El mártir, el revolucionario y el guerrillero establecieron una relación intrínseca con la autoidentificación palestina. Las fórmulas empleadas fueron: revolución armada y guerra de liberación popular palestina, ambas representativas de la forma de entender ellos mismos la situación que atravesaban. Igualmente, la OLP institucionalizó y estructuró el movimiento puesto que estaba en una situación de dispersión geográfica en diversos Estados nacionales y con Palestina ocupada. Para finalizar, interpretaremos algunos rasgos de los procesos históricos ocurridos en la región, con la intención de aproximarnos a la comprensión de la actualidad.
27 páginas
https://bdigital.uexternado.edu.co/handle/001/2558
ISBN   9789587902723
MLA. Capítulos en libro de investigación - Grupo de Investigación: OASIS
 
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miércoles, 19 de junio de 2019

III Encuentro América Latina y Medio Oriente. América Latina e Oriente Medio

¿El modelo Sirio en Venezuela?

Participación en el Programa de Radio Nacional Colombia
https://www.radionacional.co/podcasts/que-sera/modelo-sirio-venezuela-parte-01
 En esta primera parte del programa, se analiza el contexto histórico del conflicto en Siria y la intervención militar de potencias mundiales como Estados Unidos y Rusia. Los expertos hacen un balance sobre las consecuencias de dicha injerencia y las similitudes y diferencias que se presentan en el caso Venezolano.

https://www.radionacional.co/podcasts/que-sera/modelo-sirio-venezuela-parte-02
En esta segunda parte de ¿Por Qué Será? se dialoga sobre la condición actual de Venezuela bajo el gobierno de Nicolás Maduro y las tensiones políticas mundiales por las sanciones de Estados Unidos y el apoyo militar y diplomático de Rusia e Irán. Además se analizan las implicaciones que este conflicto tiene en Colombia, no solo en temas migratorios sino políticos y económicos.

1. Camilo Vargas Betancourt

Politólogo e internacionalista de la Universidad del Rosario, máster en Sociología de lo Político y de la Acción Pública del Instituto de Estudios Políticos (Sciences Po) de Bordeaux. Ha sido catedrático sobre temas de relaciones internacionales y conflicto armado.

2. Martín Martinelli // desde Argentina

Docente - investigador con dedicación exclusiva en la Universidad Nacional de Luján.
Profesor de: Historia Contemporánea; Historia de Asia y África; y Seminario Historia del Medio Oriente Contemporáneo. Miembro de la Cátedra Libre de Estudios Palestinos “Edward Said”. Doctor en Ciencias Sociales y Humanas. Co-Director del Área Historia Medio Oriente Contemporáneo del Programa de Estudios Históricos y Antropológicos Americanos. Integrante Grupo de Trabajo “Medio Oriente y América Latina” del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales CLACSO.

3.  Ronal F. Rodríguez // @ronalfrodriguez

Vocero e investigador del Observatorio de Venezuela de la Facultad de Ciencia Política, Gobierno y Relaciones Internacionales de la Universidad del Rosario (desde 2004 a la fecha). Politólogo, internacionalista y Magister en Ciencia Política, docente y coordinador de la Cátedra Venezuela de la Universidad del Rosario, director del programa "Esto no es una frontera, esto es un río" en U Rosario Radio.

4. Óscar Julián Palma // vía skype

Profesor Principal carrera en la Facultad de Ciencia Política, Gobierno y Relaciones Internacionales, Universidad del Rosario. Doctor en Relaciones Internacionales del London School of Economics and Political Science y Master en Estudios en Seguridad Internacional de la Universidad de Leicester. Es Conferencista Invitado del George Marshall European Center for Security Studies, en Alemania, para el curso de Terrorismo y Seguridad.

5. Juan Camilo Ito  // vía telefónica

Politólogo de la Universidad del Rosario. Magíster en relaciones internacionales y ciencia política de Sciences Po Bordeaux e integrante de la red de estudios Colombo-Venezolanos.

lunes, 11 de febrero de 2019

Orientalismo, Cultura e imperialismo y La cuestión palestina


Ultimátum 1 de febrero de 2019

 

Martín Martinelli

El objetivo de este artículo es analizar en conjunto la obra de Edward Said, así como su influencia. Esta ha recibido el reconocimiento internacional por uno de sus libros principales, como el que se conmemora y pone en nuevas valoraciones este año, el cual forma parte de una trilogía que componen además Cultura e imperialismo y La cuestión palestina, dos afirmaciones más teóricas y la presentación de un caso que hace cuatro décadas era ignorado a escala mundial.
Orientalismo
El orientalismo es una noción con la que se buscó explicar la respuesta de Occidente (entendido como Estados Unidos y Europa) al islam y la experiencia de la civilización musulmana. Tanto es así que desde la academia, los medios y Hollywood, se representó una imagen y se construyó una idea de Oriente. Dichos medios masivos han desempeñado un papel preponderante en el siglo XX y lo que va corrido del XXI, hasta el punto de que esa información fragmentada se presenta como una descripción objetiva de la realidad. Las imágenes y conceptos que se divulgaron acerca del Medio Oriente y el «mundo árabe» estuvieron al servicio de la política exterior occidental y el imperialismo que impulsaban.
Luego de la disolución de la Unión Soviética, y por consiguiente del «comunismo» enemigo, el nuevo «otro» fueron tanto el islam como los musulmanes. De ese modo, se deshumanizó toda una cultura mediante la estrategia de representar a los países donde la mayoría de la población es islámica como terroristas, salvajes y despóticos. Se resignificó así una antigua demonización (Murphy, 2005).
Según las propias palabras de Said, el orientalismo es un estilo de pensamiento basado en la distinción ontológica y epistemológica que se establece entre Oriente y Occidente. En tal sentido, numerosos escritores han aceptado esta diferencia esencial entre Oriente y Occidente para confeccionar teorías, novelas, descripciones sociales e informes políticos relacionados con Oriente, su gente, sus costumbres, su «mentalidad» o su destino.
En líneas generales, la acepción de orientalismo más admitida es la académica, etiqueta que sirve para designar una gran cantidad de instituciones de este tipo. Alguien que enseñe, escriba o investigue sobre Oriente es un orientalista, y lo que él hace, orientalismo. Orientalismo, por un lado, se trata de poner en discusión el término, y comenzó con los imperialismos británico y francés decimonónicos.
El orientalismo es la más grandiosa de todas las narrativas, un discurso (o metadiscurso) global que representa a Oriente. Los textos orientalistas, por una parte, ayudaron a crear conocimiento y la realidad supuesta que describieron, y por otra parte, esto convergió en el colonialismo y le sirvió como plataforma. Este libro, que se convirtió en una corriente de pensamiento, estableció jerarquías en relación con lo político y el poder, dado que demostró los vínculos entre el orientalismo y el imperialismo.
Las críticas hacia esta obra destacada fueron que estaba reducido al Medio Oriente y dejaba de lado lo que podría denominarse los demás orientes: chino, indio o del Sureste Asiático, a la vez que el análisis era muy general. Y principalmente, que no ofrecía una resistencia al eurocentrismo —analizado, entre otros, por Samir Amin—, al tiempo que no reconocía a predecesores de las ideas que planteó, tales como Tibawi, Abdel Malek o Panikkar.
Retomaremos aquí en primer término a Tibawi, quien propuso que el orientalismo moderno se basó en imágenes medievales del islam y buscó diseminar la idea de una supuesta inferioridad árabe. Y en segundo lugar, a Abdel Malek, que esbozó una idea persistente: el hombre europeo, blanco y cristiano, se puso desde la antigüedad griega como la medida de todos los hombres en todas partes. En los diferentes aspectos, el Oriente sería el pasado, estático, monolítico y ahistórico; el estudio del árabe como lengua muerta lo ejemplifica. En suma, esto absolvería de culpa al colonialismo, al que se le acusa de un pretendido atraso en las regiones conquistadas (Sardar, 2004, pp. 100-132).
Pese a esto último, debemos señalar que el orientalismo es tanto una disciplina como un discurso de poder, e incidió para perpetuar el dominio de Occidente sobre las demás regiones del globo. Esa visión, que estuvo acompañada de la visión eurocéntrica, continúa en la actualidad, aun cuando con un pensamiento cada vez más crítico.
Cultura e imperialismo
En Cultura e imperialismo, otra de sus obras más destacadas, y como continuación de su libro más conocido, Orientalismo, Said le otorga un papel notable a la novela como constructora de sentido. Así pues, el orientalismo es un modo de relacionarse con Oriente, basado en el lugar especial que este ocupa en la experiencia de Europa Occidental.
Allí analiza el siglo XIX, época en que el pensamiento relativo a la identidad resultó estratégico en las culturas imperialistas. Estas influyeron a escala mundial, condicionadas por nociones alusivas a «ser inferior», «razas sometidas» y «pueblos subordinados». En esa misma centuria, la oposición Oriente-Occidente estuvo realzada por el racismo y el colonialismo irradiados desde Europa. La distinción entre Occidente-Oriente predominó en la literatura, la pintura y la música europeas decimonónicas. Esa imagen de Oriente con su despotismo, sensualidad y fecundidad maravillosos, se usufructuó para justificar el colonialismo. De acuerdo con los pensadores europeos, Oriente quedó establecido como sinónimo de lo exótico, lo femenino y lo originario.
Así las cosas, surgió un abismo entre las dos identidades culturales supuestas al promoverse la orientalización de Oriente y lo oriental, al igual que un fuerte sentimiento de identidad cultural amurallado. Este estuvo esencializado hasta el grado de hacer de Oriente el gran otro de Europa, junto con África y América (Said, 2001, pp. 40-41).
En ese sentido, los imperialistas proyectaron la idealización de una superioridad «blanca» o europea, expresada en la «carga del hombre blanco» o la mission civilisatrice. La academia europea generalizó la concepción de una supuesta supremacía a través de su interpretación de las diferencias humanas. Las exploraciones en África, la conquista de América, el colonialismo y la esclavitud son acontecimientos ocurridos en ese contexto histórico (Martinelli, 2013).
 La cuestión palestina
Su libro La cuestión palestina se tradujo al español en 2013, treinta y cinco años después de su aparición, lo que implica varias cosas. En esa obra se aplican los conceptos de orientalismo y de cultura e imperialismo al caso palestino, sobre el que Said escribió a lo largo de su vida.
El contexto histórico de la región, al cual remite este escritor en su obra, se podría resumir de la siguiente manera: la decadencia y la posterior disolución del Imperio otomano, así como la intervención en la zona de los británicos y de los franceses, iniciaron este proceso. Estas potencias dividieron la región en zonas de influencia y de mandatos, que serían en buena medida los límites de los estados nacionales creados en esos territorios. La diferencia sustancial con los demás países que surgieron en la zona fue que Gran Bretaña y el movimiento sionista se aliaron (con algunos desacuerdos políticos) para crear un «hogar nacional judío» en Palestina. En aquellos momentos, el proyecto de la Gran Siria coexistía con esa propuesta. El desmembramiento del territorio palestino dificultó crear un Estado independiente, a diferencia de lo que sucedió con el caso del mismo Israel, o de Egipto, Siria, Irak, Jordania y Líbano.
Los palestinos se manifestaron contra la recomendación de partición de Palestina, puesto que, por lógica, un movimiento nacional no repartiría su tierra con el movimiento colonizador. En cambio, los sionistas la aceptaron como algo positivo, que les brindaría legalidad internacional. Estados Unidos demostró su apoyo a la causa al presionar para lograr una votación positiva en la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Gran Bretaña, luego de la recomendación de la partición de Palestina en 1947, indicó su retiro de Palestina para el 15 de mayo de 1948. El Estado árabe estaba imposibilitado de nacer como consecuencia de los impedimentos de los palestinos, el triunfo militar del nuevo Estado de Israel y la complicidad de algunos líderes árabes, como el rey Hussein de Jordania. Para tomar un parámetro, no hay otra región del mundo que haya interesado de manera similar ni tan persistente al centro hegemónico.
El Medio Oriente tuvo una relevancia inusitada en la geopolítica mundial y fue una de las zonas tradicionales de intervención militar en la historia contemporánea, lo que continúa hasta el día de hoy, si bien reflexionó también acerca de la condición árabe que sufrió: por una parte, la opresión otomana; luego de la Primera Guerra Mundial, la franco-británica, y a partir de la Segunda Guerra, el imperialismo estadounidense. Y por otra parte, subrayó el hecho de que esas poblaciones poseen lazos innegables —aun con sus disputas internas— frente al divide y reinarás (Said, 2003b).
La relación Oriente-Occidente impregnó la cuestión palestina y al mismo autor: Edward (inglés) Said (árabe). Se ha procurado presentar al Estado de Israel como el Occidente, civilizado, sedentario, con un elevado desarrollo tecnológico y capitalista, en desmedro de Palestina o los palestinos, vistos como el Oriente, lo tradicional, atrasado, el terrorismo, los nómadas o beduinos. Said actuó en pos de exhibir algo diferente.
En cuanto al tema de Palestina y su relación con Israel, prosiguió con libros como Crónicas palestinas, pero aquí nos referiremos al documental In Search of Palestine (1998), el cual sintetiza parte del pensamiento saidiano. En ese video, Said protagonizó el regreso a su tierra natal en una exploración de su pasado, además de que buscó reflejar la concordancia entre los recuerdos personales del escritor y la memoria compartida del pueblo palestino. En un pasaje, expresó: «La única palabra para esto es desastre, y esta es, en esencia, la tragedia palestina». En ese momento, se refería a la expansión de un asentamiento y a la manera en que se practicaban a diario nuevos desalojos, expropiaciones y demoliciones de hogares. Finalmente, muestra cómo la población palestina siente impotencia por no poder hacer nada para impedirlo.
Otro ejemplo es cuando este pensador palestino-estadounidense trazó una de las reflexiones más profundas sobre la opresión del pueblo palestino en su libro After the Last Sky (1999), en el que debatió sobre el desplazamiento, la falta de tierra, el exilio y la identidad. Además, pidió el reconocimiento internacional de los reclamos palestinos, así como también criticó la brutal ocupación y el desposeimiento que han sufrido durante más de medio siglo.
Nuevo prefacio a Orientalismo (2003)

  • Desde la disolución de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) hasta los sucesos actuales, la potencia hegemónica postuló al islam y el Medio Oriente como el nuevo enemigo de Occidente, en remplazo del comunismo. Vale la pena retomar algunas cuestiones de la etapa precedente inmediata, donde destacamos el cambio de escenario previo: la Revolución iraní islámica de 1979; el pacto de Camp David entre Egipto e Israel de 1978-1979; también en 1979, la invasión soviética de Afganistán con los muyahidines, y la guerra entre Irak e Irán de 1980-1988. A su vez, Estados Unidos lideró la guerra del Golfo de 1991, en detrimento de Irak, es decir, la intervención imperialista directa estadounidense.
  • A partir del 2001, se realizaron las invasiones encabezadas por Estados Unidos sobre Afganistán e Irak; el descubrimiento del desarrollo nuclear de Irán con una percepción de amenaza, y el denominado «despertar árabe» en 2011, que generaron un proceso de agitación o intento de variación del orden establecido. Esta situación demostró cómo el balance de poder regional se inclinó hacia tres países no árabes: Irán, Israel y Turquía.
Veinticinco años después de publicado Orientalismo, Edward Said vislumbró ese nuevo imperialismo que se avecinaba o, más bien, se intensificaba con la invasión estadounidense a Irak y Afganistán, aunque la influencia de dicha potencia en la zona y su acción directa no dejaron de estar presentes durante los siglos XX y XXI. En su nueva introducción plantea, si la leemos en su contexto, y en conjunto con sus escritos, un hilo conductor no solo humanista, como él mismo se define, sino que su destacado rol intelectual fue acompañado por el activismo político y su denuncia de los avasallamientos de los derechos humanos.
Said defiende la tesis de que todo imperio pretende establecer diferencias entre cuál es la misión supuesta que se le encargó, para poder expandirse, apropiarse cada vez más de territorios y recursos. En otras palabras, detrás del velo de una hipotética superioridad occidental, y de la tarea de civilizar —mission civilisatrice o «carga del hombre blanco»—, llevar el orden, el progreso y la democracia; en realidad, la fuerza es el recurso empleado para dominar esas regiones.
Adicionalmente, Said estableció similitudes entre los académicos pagados por los británicos en la India, la región de la Mesopotamia, Egipto y África Occidental; los ejércitos franceses en Indochina y África del Norte, y los asesores estadounidenses que se valieron de los mismos estereotipos y justificaciones con el objetivo de ejercer la violencia y el despotismo que ellos mismos les atribuían a las poblaciones subyugadas.
Otra crítica presente en toda su obra fue hacia las ortodoxias religiosas y nacionalistas, pero que igualmente los medios masivos —junto a la academia— inducen a una mirada ahistórica y sensacionalista de los hechos. Esto último, en el caso analizado, no solo es para vender su mercancía sino que se trata de demonizar a un enemigo desconocido, «terrorista», el cual es merecedor de una «guerra preventiva» (acompañada de los «daños colaterales»), que deviene en un cambio de régimen unilateral. Es decir, que todos esos eufemismos y el control del lenguaje, las imágenes difundidas, actúan en conjunto para perpetrar ese nuevo imperialismo sobre la región (recordemos que en 2016 se cumplieron los cien años del Pacto de Sykes-Picot), donde se repartió el territorio sin atender a las características de los propios habitantes. Ese escrito engloba una serie de ideas saidianas, en un ciclo sobre el que Said reflexionó pero que aún continúa, en el cual tanto las potencias europeas como Estados Unidos, junto a la URSS (luego Rusia también), pretendieron influir y prevalecer en la toma de decisiones del Medio Oriente.
Durante los cuarenta años transcurridos desde Orientalismo, así como también en este último periodo, las potencias —encabezadas por Estados Unidos y los miembros de la OTAN— intentaron reconfigurar el mapa y los estados nación de la región, al tiempo que hubo intervenciones devastadoras de estas en Irak, Siria, Afganistán y Libia, cuyas consecuencias sufren sus habitantes. Por lo tanto, esta imposición ideológica, simbólica y material (aunque resistida por diversos medios) nos evidencia el accionar de las potencias capitalistas, las cuales abusan —en esta región más que en otras— de su poderío militar y financiero.
Intelectuales de la talla de Said marcaron la impronta de uno de los modos inequívocos de enfocar el análisis de la coyuntura mundial, como sus reprobaciones a las presuntas jerarquías de poder entre los sistemas culturales.  Su voz nos resulta recurrente para pensar estos entramados entre la cultura, el poder y el imperialismo. A través de este breve recorrido por algunas de las obras de este activista palestino-estadounidense, expusimos la manera en que denunció el imperialismo cultural con el que se trató de enmascarar la opresión y apropiación de los recursos del «mundo árabe».

Referencias
Chedid, S. (2003). El legado de Edward Said.  Buenos Aires: Canaán.
Martinelli, M. (2010). Antítesis, 3 (6), 1077-1093. Recuperado de http://redalyc.uaemex.mx/src/inicio/ArtPdfRed.jsp?iCve=193314445004.
Masalha, N. (2011). Edward Said: el sionismo y la visión democrática laica. En S. Chedid y N. Masalha (eds.), La Biblia leída con los ojos de los cananeos. Recordando a Edward Said. Buenos Aires: Canaán.
Murphy, S. (2005a). La imagen demonizada del islam: ayer y hoy. Recuperado de cdsa.aacademica.org/000-006/538.pdf.
Said, E. (1979). The Question of Palestine. Nueva York: Times Book (versión en español, 2013. Barcelona: Debate).
Said, E.  (1990). Orientalismo. Madrid: Prodhufi.
Said, E. (1996). Cultura e imperialismo. Barcelona: Anagrama.
Said, E. (2001). Crónicas palestinas. Barcelona: Grimaldo.
Said, E. (2005). Cultura, identidad e historia. En G. Schröder y H. Breuninger (comps.), Teoría de la cultura (pp. 37-53). Buenos Aires: FCE.
Sardar, Z. (2004).  Extraño Oriente. Historia de un prejuicio. Barcelona: Gedisa.
Documental
 In Search of Palestine – Edward Said’s Return Home (BBC) (1998). Una producción de la BBC (50 minutos).

Martín Martinelli
Universidad Nacional de Luján
martinellima1982@gmail.com

ZERO IMPRESA EDICIÓN 36
ISSN ELECTRÓNICO: 2344-8431
ISSN IMPRESO: 0123-8779
Fuente Revista Zero Universidad Externado de Colombia 2019
 https://zero.uexternado.edu.co/orientalismo-cultura-e-imperialismo-y-la-cuestion-palestina/

miércoles, 5 de diciembre de 2018

Estudios del Mashriq y el Magrib desde la contemporaneidad. Problemas de la colonización, descolonización, transformaciones y resistencias.




Título de la mesa nº 16: Estudios del Mashriq y el Magrib desde la contemporaneidad. Problemas de la colonización, descolonización, transformaciones y resistencias.
Coordinadores:
Ángel H. Molina (UNR-CEDCU) angelhmolina@gmail.com
Martin A. Martinelli (UNLu – UBA) martinellima1982@gmail.com
Gabriel F. López (UBA – ISPJVG) historialfilo@gmail.com
Objetivos:
La mesa propone reflexionar sobre los cambios políticos, sociales, económicos y culturales que han atravesado el Magrib y el Mashirq desde los procesos de colonización y descolonización, así como las transformaciones se encuentran actualmente en curso. Nos convocamos a reflexionar en torno a las experiencias de la colonización, las condiciones y procesos de descolonización, hasta los movimientos que han llevado a cabo las sociedades para alcanzar la instauración de regímenes democráticos. Daremos énfasis a los aportes y conflictos en los procesos por la liberación en la región, tanto en sus aspectos políticos, diplomáticos, culturales, económicos y/o sociales. El objetivo de esta mesa es brindar el espacio en el que exponer y desarrollar enfoques críticos sobre los proyectos coloniales que ejecutaron los europeos y los países colonialistas luego de asumir el liderazgo del imperialismo mundial en el transcurso de la segunda mitad del siglo XIX, y las consecuencias que en el pasado y aún en el presente se manifiestan tanto entre los colonizadores como en el seno de los pueblos colonizados en Asia y África.
Atenderemos, sin excluir otras propuestas pertinentes, a: 1- el proceso denominado “Primavera árabe” y sus múltiples consecuencias, 2- la situación e historia del pueblo palestino así como la sociedad y el régimen israelí, 3- las problemáticas de la descolonización y los abordajes críticos que la piensan y la analizan (materialismo histórico, perspectiva de poscolonial y subalternistas, entre otras tendencias). La mesa propiciará el debate transversal, el cruce entre lo epistemológico, la lectura histórica y la comprensión a partir de las teorías críticas propuestas para ello, evocando así la tensión entre la superación del colonialismo y la persistencia de la colonialidad y el imperialismo. Nuestro propósito es problematizar el conocimiento histórico de la región, dada la gran importancia de los acontecimientos contemporáneos. El esfuerzo crítico en el análisis de los procesos permite una conexión entre modernidad, nacionalismo, colonialismo e imperialismo, términos profundamente ligados. La propuesta aspira a abrir el debate hacia nuevas formas interpretativas de la realidad del mal llamado “Medio Oriente” desde una perspectiva de sur a sur, una mirada argentina y latinoamericana ya que encontramos entre ambas regiones una empatía epistemológica digna de ser aprovechada para nuestras inquietudes teórico-políticas en los problemas a tratar.
2. PRESENTACIÓN DE RESÚMENES
Hasta el 15 marzo de 2019 a las 23:55 hs. Se deja establecido que NO habrá prórroga para la presentación de resúmenes.
2.1. Criterios de presentación

Los trabajos podrán ser de autoría individual o en coautoría con un máximo de 2 (dos) autores. No se aceptará más de un trabajo por autor, ya sea en forma individual o en co-autoría.
Los resúmenes tendrán un mínimo de 350 y un máximo de 400 palabras, y deberán contener los planteos problemáticos del tema a desarrollar. El tipo de letra requerida será Times New Roman, tamaño 12, interlineado de 1,5.
Cada resumen deberá tener un encabezado donde conste el título de la ponencia, nombre y apellido de los/as autores/as, correo/s electrónico/s y filiación institucional (sin formatos: ni subrayado, ni bold ni itálica, etc.) e indicar tres palabras clave.
2.2. Modalidad de envío
Los resúmenes deben:
1. ser cargados en el formulario web de las XVII Jornadas Interescuelas alojado en la siguiente dirección: https://goo.gl/forms/PySOd4ODVWd4zTdW2 y,
2. ser enviados a los mails de los/as coordinadores/as de la mesa seleccionada.

No se aceptarán resúmenes que no hayan cumplido estos pasos.
Los/as coordinadores/as deberán acusar recibo de la correcta recepción.
3. ACEPTACIÓN DE LOS RESÚMENES POR PARTE DE LOS/AS COORDINADORES/AS DE MESA

Hasta el 29 de marzo del 2019.
Una vez finalizado el plazo de recepción de resúmenes, los/as coordinadores/as serán los encargados de comunicar su aceptación o rechazo a los/as autores/as.
Asimismo, deberán remitir al mail institucional de las Jornadas (jornadasinterescuelashistoria@gmail.com) un listado donde harán constar nombre y apellido de los/as autores/as, correo/s electrónico/s, filiación institucional y título de los resúmenes aprobados (sin formatos: ni subrayado, ni bold ni itálica, etc.).
Se deja aclarado que la aceptación de los mismos no implica la posterior aceptación de ponencia.

4. PRESENTACIÓN DE PONENCIAS
Hasta el 30 de junio de 2019 a las 23:55 hs.
4.1. Criterios de presentación

Las ponencias podrán tener un máximo de 40000 caracteres, en letra Times New Roman, tamaño 12, interlineado de 1,5. Las citas a pie de página, con el mismo tipo de letra y en tamaño 10, numeradas consecutivamente de 1 en adelante. Oportunamente se fijarán los requisitos para cita de bibliografía.
4.2. Modalidad de envío
Las ponencias serán enviadas a los mails de los/as coordinadores/as de la mesa seleccionada y también deberán ser cargadas en un formulario web de las XVII Jornadas Interescuelas que oportunamente será comunicado.
Ambos pasos serán obligatorios para la aceptación de las ponencias. No se aceptarán ponencias que no hayan cumplido estos pasos.
4.3. Comunicación a los/as interesados/as de la aceptación o rechazo de las propuestas de ponencia por parte de los/as coordinadores/as

Hasta el 31 de julio de 2019.
Los/as coordinadores serán los encargados de comunicar la aceptación o el rechazo de las ponencias a sus autores/as. Asimismo, deberán remitir al mail institucional de las Jornadas (jornadasinterescuelashistoria@gmail.com) un listado donde harán constar, en orden de exposición, nombre y apellido de los/as autores/as, filiación institucional, correo/s electrónico/s y título de las ponencias aceptadas (sin formatos: ni subrayado, ni bold ni itálica, etc.).
Se deberá tener en cuenta que para el funcionamiento de cada Mesa se requiere un mínimo de diez (10) y un máximo de veinte (20) ponencias.
Se aclara que no está previsto el financiamiento para coordinadores.

SEDE:
Facultad de Humanidades - Universidad Nacional de Catamarca
INFORMES:
Departamento de Historia de la Facultad de Humanidades, UNCA
Dirección: Avenida Belgrano 300, San Fernando del Valle de Catamarca
Teléfono: +54 383 4422708
Fax: +54 383 4450168
Facebook: jornadas interescuelas/departamentos de historia
Instagram: jornadasinterescuelashistoria
E-mail: jornadasinterescuelashistoria@gmail.com

martes, 4 de diciembre de 2018

Un gobierno sometido a la autoridad israelí


El conflicto entre Israel y los palestinos no tiene tregua. Qué rol ha cumplido históricamente la Autoridad Nacional Palestina en esta disputa por los territorios y cuál es su alcance hoy.

Luca Di Nardo // Lunes 23 de julio de 2018 | 14:37



Aunque creada con ese propósito, la ANP no ha logrado aún convertirse en un puente para la solución del conflicto palestino-israelí. (Foto: Télam)
La mayoría de los analistas internacionales concuerdan al afirmar que, al menos en un primer momento, la creación de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) significó un avance en el reclamo de los palestinos que, al firmar los acuerdos de Oslo en 1993, buscaban recuperar su independencia para poder crear su propio Estado en un territorio que desde la "Guerra de los 6 Días", ocurrida en el año 1967, estaba ocupado por Israel.

Varios años después de su creación, las limitaciones impuestas sobre su poder hacen que la situación en esa zona de Medio Oriente esté lejos de ser la ideal y que los palestinos sigan reclamando por su independencia.

La ANP funciona como una entidad política con autonomía, pero no independiente de Israel. “No tiene control de sus límites aéreos, marítimos o terrestres”, destaca el doctor en Ciencias Sociales y Humanas de la Universidad de Luján Martín Martinelli, cuya tesis se basó en la “identidad nacional palestina”.

“Está sujeta fundamentalmente a la ayuda financiera internacional que proviene de los países del Golfo, con Arabia Saudita a la cabeza”, señala el analista internacional Jorge Castro. Por su parte, el politólogo especializado en relaciones internacionales Mariano Beldyk agrega que “depende del propio Israel para recibir alimentos, elementos de construcción, energía y hasta agua potable”.

Martinelli puntualiza que el territorio que controla la ANP está dividido en tres zonas, en las cuales tiene diferentes niveles de poder y distintas responsabilidades. Sin embargo, no todas esas zonas son controladas por la ANP, cuyo presidente actual es Mahmoud Abbas, del partido político Fatah. En la Franja de Gaza, donde las imposiciones israelíes son aun mayores que en Cisjordania, el control está en manos de Hamas, la organización islamista tildada de "terrorista" por Occidente.

Esta inestabilidad interna genera que haya diferentes actores que buscan participar de la negociación internacional en reclamo de la independencia. En los últimos años, pese al poder de Hamas, la decisión de Fatah de adoptar una postura más dialoguista, según explica Beldyk, lo ha posicionado como el interlocutor legítimo en las negociaciones.

El conflicto entre Israel y el pueblo palestino perdura desde la fundación del Estado de Israel, en 1948, hasta la actualidad, y a los históricos motivos religiosos envueltos en el enfrentamiento se suman fuertes intereses políticos y económicos por el control de la región. "Lo que hace Israel es cercenar la ANP para que no pueda actuar", explica Martinelli al referirse al accionar de Israel en Cisjordania, particularmente respecto de la construcción de nuevos asentamientos de colonos israelíes. En el mismo sentido, Jorge Castro agrega: "Hay una penetración completa de Israel (sobre el territorio palestino)".

"Hace ya años que la ANP debería haber sido el puente hacia una solución definitiva", afirma Beldyk. Si bien su creación significó un primer paso importante, su poder está limitado por el propio Israel, cosa que, sumada a las diferencias entre los diferentes grupos palestinos, hace que no tenga la influencia necesaria para configurarse como un actor central en la zona y que la vida en ese territorio sea, para muchos palestinos, la de “una prisión a cielo abierto”, como define Martinelli.
Fuente
http://www.diariopublicable.com/politica/8156-un-gobierno-sometido-a-la-autoridad-israeli.html